Crystal Lagoons®, la empresa basada en Miami responsible de llevar lagunas cristalinas a todo el mundo, ha continuado su compromise de llevar el world’s top amenity a múltiples áreas de los Estados Unidos, con Texas como su estado “estrella”.
Debido a su geografía y amor por la vida de playa, Crystal Lagoons® realizó una promesa de llevar una experiencia tropical idílica a múltiples regiones de Texas, que han sido bien recibidas tanto por visitantes como residentes de proyectos inmobiliarios.
En una conversación con la versión de Austin de Business Journal, Iván Manzúr, Vicepresidente de Ventas de Crystal Lagoons dijo “Texas es, sin lugar a dudas, uno de los estados más atractivos para Crystal Lagoons. Es por su población, por su tamaño y por la idea de que podamos entregarle vida de playa a los tejanos”.
De acuerdo a Manzur, existen 70 proyectos en distintas etapas de negociación en Texas, y un 90% de ellos corresponden al modelo de negocios PAL™, que crea lagunas adimistradas por privados con acceso público a través de venta de tickets, abriendo las puertas para inversionistas y desarrolladores a que sean dueños del world’s top amenity junto a una fuente de ingresos.
En Texas, proyectos como Balmoral y Lago Mar han tenido una recepción positiva, logrando máxima capacidad en sus áreas públicas. En Lago Mar se registraron ventas diarias de más de $50,000 dólares incluso durante la pandemia gracias a sus aguas turquesa, control de acceso y aforo y reglas de distanciamiento.
Fases de inversión
Los proyectos PAL™ atraen a los inversionistas, porque pueden ser desarrolladas con distintos formatos de inversión y con modelos con mayor o menor infraestructura. Incluso aquellos proyectos con mínima infraestructura inicial han sido un éxito, pues se pueden expandir con sus propias utilidades.
El modelo más acotado en infraestructura considera la laguna cristalina navegable de grande proporciones y amplias playas, además de un área verde con quioscos para servicios básicos.
El segundo formato con infraestructura intermedia, contempla una península para matrimonios, un anfiteatro para espectáculos y conciertos, además de diversos espacios para eventos y ferias.
Finalmente, con máxima infraestructura e inversión, el modelo más completo incorpora todo lo anterior junto con espacios de retail, restaurantes y hoteles.